sábado, 5 de enero de 2019

Día #7: Auschwitz & Gueto

Ha tocado madrugar. A las 7.00 hrs de la mañana cogiamos el autobús de línea regular hacia Auschwitz.

Se puede visitar por libre. Simplemente seguir el sentido de las flechas y haberse documentado un poco antes. Eso si, tienes que reservar tu entrada individual ya que tienen cupos de entrada por franjas horarias. Impresiona el letrero nada más llegar y con todo nevado...

A simple vista, parece un pueblo con casas iguales perfectamente alineados en calles horizontales y perpendiculares...



...pero las alambradas, la torres vigía, la pared de fusilamiento, y otras atrocidades te devuelven a la realidad....





Se van viendo barracones a ambos lados de las calles principales. En cada barracon, te van contando una parte de la vida en el campo de concentración. No hemos sacado fotos de muchas cosas simplemente por respeto. Hay kilos de pelo (con el que luego hacían tejidos), zapatos, peines, maletas, cazuelas ....   

Según llegaban, los clasificaban entre aptos para trabajar (uno de cuatro hombres) o directos a la cámara de gas, casi todas las mujeres y los niños. Los que se quedaban trabajando no vivían más de cuatro meses. Hemos estado dentro de una cámara de gas y luego hemos visto los hornos crematorios. 



Tras esta estremecedora visita, un bus te acerca al otro campo en Auswichtz el de Birkenau, a 3 kilómetros de distancia y creado con un único fin, la exterminación. Impresiona la estampa de las vías de tren introduciéndose en el campo...


... y las hectáreas de terreno que ocupa.




Los nazis lo semi-destruyeron justo antes de abandonarlo, para no dejar huella de las atrocidades allí cometidas, pero no lo hicieron del todo. Los barracones están en bastante buen estado, aunque no hay rastro de las cámaras de gas ni de los crematorios. 


Un vagón de la época, similar al que utilizaban para trasladar a las personas que iban a ejecutar.



Con el cuerpo encogido, y no solo por el frío y la nieve, bus de vuelta a Cracovia para continuar con nuestro recorrido. Queríamos aprovechar la luz natural para, atravesando Kazimierz...

...llegar al Gueto. Aquí destacan varias cosas. Por un lado, una iglesia muy grande y bonita.

Entre calles, una de las salas de oración que, de manera clandestina, eran utilizadas para el rezo. Al lado casas que se caen a trozos junto a casas recién construidas o solares en ruinas. Todo contrates.


La plaza central, ahora bautizada como la de los héroes del Gueto, tiene un monumento en forma de sillas, como recuerdo de la espera de los judíos antes de ser embarcados en los trenes...





Destaca la farmacia de la esquina, donde el dueño y los dependientes, los únicos polacos con permiso para vivir y dentro del gueto. Pero lo destacable es que ayudaron en lo que pidieron a numerosos judíos. Roman Polanski le dedicó su oscar por El Pianista.

Dos fragmentos del gueto siguen intactos, a modo de recuerdo. Macabra la forma del muro con la forma de las lápidas judías. 





La nevada iba en aumento y se hace de noche. Solo nos quedaba, acercarnos a visitar el Museo de la Fábrica de Schindler.


Nada más llegar susto: mensaje en la puerta que decía que el cupo de entradas para el día se había agotado! Aún asi, hemos entrado y viendo una pantalla que proyectaba imágenes del interior, de repente no sabemos cómo, la pantalla informa que se habían librado 8 entradas. Hemos corrido hasta el puesto de caja... y hemos podido entrar!

El museo cuenta la historia de los judíos en Cracovia durante la invasión nazi. Con fotos, periódicos de la  época, testimonios de supervivientes ... Schindler es solo un apartado del museo.









.... nos hemos venido al café Singer.  A tomarnos un chocolate y una ipa. En una mesa con maquina de coser en el medio, y luz de velas. 
Y para poner el broche al intenso día, queríamos volver a probar comida kosher, en uno de los lugares típicos del centro del barrio judío. El kebab de pollo marinado en limón y gratinado acompañado de bulgur y la shakshuka, una sartenada de huevos cocinados en pimientos y tomates con falafel.  Las bebidas que tanto nos están gustando: limonada y cerveza,  ambas calientes, con especias.


La nieve sigue cayendo y eso que es para mañana sábado cuando hay anunciado aviso por fuertes nevadas. En fin, no queríamos vacaciones blancas? Pues toma!

Mañana más. Seguiremos informando

1 comentario:

  1. Hola chicos, impactante y estremecedora la entrada de hoy, pero es nuestra historia y hay que recordarla para no olvidarla. Genial el remate con una buena comida, la nieve y vuestra dedicatoria.
    Besitos

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